Habrá ocasiones, en que estemos en compañía de un querido amigo y de repente no tengamos mas de que hablar.
Guardamos entonces silencio sorprendidos. nos miramos a los ojos y nos avergonzamos mutuamente.
No sabemos que decir.
Todo ello se debe a que su soledad es también nuestra soledad.
Cuando estamos en compañía de otra persona, tenemos la necesidad de hablar y hablar por que pensamos que si no hay charla entonces no tiene sentido continuar en compañía
Cuando ambos quedan callados, es por que la soledad se ha penetrado mutuamente.
Extraído del libro "Como disfrutar la soledad"