Tras la muerte de su madre, un pequeño wallaby de cuatro meses fue recibido de urgencia en el Jardín de los Canguros (La Possonnière, Angers, Francia), un parque exclusivamente dedicado a esta especie, que alimenta a sus huéspedes con leche importada de Australia.“Cuando una hembra muere, nadie se ocupa de su bebé, al que sólo puede salvar la intervención humana. Nosotros somos los únicos que importamos leche australiana especialmente preparada para los canguros”, explica la responsable del parque, Murielle Laurendeau.El cangurito, de la raza Wallaby de Benett, la más común en los parques europeos, se llama Cruchot y goza de excelente salud.Inaugurado hace nueve años, el Jardín de los Canguros alberga en sus seis hectáreas cerca de 150 marsupiales y recibe por año más de 12.000 visitantes.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario