Culture Kultür (España) - Álbum: Spirit (2010)

Author: Unknown / Etiquetas:




Por las calles de Berlín les piden autógrafos, en los últimos dos meses han concedido más de 40 entrevistas en inglés -y solo una en español-, han llenado dos veces en salas de Nueva York, «montañas de gente» acudieron a su concierto en México... Es más, si entran en un bar de carretera de Alemania no se extrañen si encuentran su disco a la venta. Seguro que les viene a la mente algún que otro grupo que responda a estas características, pero es muy probable que en este caso no den en la tecla. Ellos son Culture Kultür, un conjunto malagueño de música electrónica que triunfa fuera de las fronteras con cada nuevo álbum que lanza. En Málaga, sin embargo, jamás han llegado a actuar.
«Lo que en otros países es música alternativa, aquí se considera underground», lamenta Salva Mainé, la voz del grupo. «Lo tengo asumido, pero me da rabia que los españoles nos pongamos un velo para no ver a la gente alternativa que hace cosas interesantes a tu lado», añade Josua, responsable de los teclados y la programación.
Tras cinco años de silencio discográfico -«la vida real se lleva un trozo importante de tu tiempo», admite Josua-, Culture Kultür regresa a la actualidad musical con 'Spirit', su quinto larga duración y su decimocuarto trabajo (sumando CD y EP). Es, además, el primero que firman con un sello español, Caustic Records, tras seis títulos con el alemán Out of Line.
Dos décadas de trabajo en las vanguardias musicales les han convertido en un grupo de referencia del future pop, una corriente derivada del Electronic Body Music. Y había ganas de volver a escucharles: en ocho semanas a la venta, 'Spirit' ha alcanzado ya el puesto número cuatro en la lista alternativa alemana DAC (Deutsche Alternative Charts) y el segundo lugar en el 'ranking' de Internet GEWC, que votan los Djs. Ahora, ultiman la preparación de los temas para el directo, que podrán escucharse en Bochum (Alemani), Madrid y Barcelona, de momento.
Sienten la música, y garantizan que lo harían de la misma manera aunque con sus creaciones no llegaran tan lejos. Por eso, para Josua, la meta del disco «era el propio disco». «En cinco años ha habido momentos y situaciones en las que pensaba que no iba a ser capaz de terminarlo y en las que te planteas tirar la toalla, dejarlo todo... pero nos encerramos los dos en el estudio y dijimos 'esto tiene que salir'. Y lo sacamos adelante», recuerda.

Recompensa
La recompensa bien vale tantos esfuerzos. No hace mucho recibieron un email de un fan canadiense que les comentaba que uno de sus temas había cambiado su modo de ver la vida. «Que tu música toque la vida de la gente... es fantástico», reconoce Josua.
Pero el éxito no llega de la nada. Si algo define a Josua y a Salva es que son -como ellos mismos confiesan- «tremendos perfeccionistas». Controlan todo el proceso de creación desde su propio estudio en casa, en la 'Kultür cueva': la producción, la grabación, los arreglos... Hay canciones de las que han llegado a hacer hasta 60 versiones, sin exagerar. «Están numeradas», aclaran. Trabajan cada tema como si fueran «cirujanos», mejorándolo con su bisturí tecnológico poco a poco, paso a paso. «Cogemos un tema y lo llevamos hasta que suena tal y como queremos», añade Salva. «En otros discos hemos tenido la sensación de que había cosas no pulidas. Este trabajo tenía que salir bien, tardásemos lo que tardásemos», apunta Josua.
Primer mercado
Su estilo future pop encuentra en Alemania su mercado principal. «Hay muchas tiendas que venden esta música, clubs donde pueden escucharse nuestro temas y un circuito independiente importante», cuenta Josua. No menos de veinte veces han actuado en directo en el país germano, en locales y festivales prestigiosos como Wave Gotik Treffen y M'era Luna. Pero también han llevado su directo a Holanda, Reino Unido, los Balcanes, Canadá, México, EE UU...
Un currículum que impresiona y en el que no aparece por ningún sitio la palabra Málaga. «Aquí somos invisibles. Me da rabia el caso que se hace a tendencias que duran meses...», se queja Josua. Lamentan que en la capital no existan clubes o salas que apuesten decididamente por este tipo de música, o al menos la programen una vez cada poco tiempo, lo que dificulta que se fidelice al público. De hecho, de momento, su disco se vende en la provincia solo en Candilejas y bajo pedido en la Fnac. «En Málaga no hay gente suficiente que tenga una idea remota de lo que hacemos nosotros para hacer un concierto», admiten.
Pese a todo, Málaga es y seguirá siendo su base de operaciones. Desde aquí exportan su música a todo el mundo a través del sello discográfico y de las nuevas tecnologías (www.culturekultur.com). Pero no pueden permitirse vivir de su creatividad. «Para eso, tendríamos que irnos a Alemania y empezar a hacer los circuitos de salas pequeñas, preparar remezclas, colaboraciones, sacar un disco cada dos años...», explican. Y, además, les obligaría a estar lejos de los suyos. Por eso, optaron por ganarse el pan como ingeniero informático (Salva) y como comercial (Josua). «Puede que esos trabajos no nos llenen tanto, pero nos permiten hacer en la música lo que nos da la gana». Y la fórmula funciona.
Fuente: www.diariosur.es

0 comentarios:

Publicar un comentario